que un buen cuadro moderno;
me importa más un antiguo cuadro
que un frágil moderno jarrón.
En el andar siempre contiguo
al insondable espíritu de lo eterno
con que la vida feliz me labro,
pongo siempre razón y corazón.
Cuadro posiblemente perteneciente a la antigua escuela de pintores del Círculo Cátaro de El Escorial. Esta escuela secreta fue iniciada en 1502 por Leonardo Da Vinci y desapareció en España (por decisión eclesiástica) al descubrirse su neo-herejía, alrededor de 1795, de modo que la obra es anterior a esa fecha. Respetando aspectos históricos como los más básicos conocimientos arquetípicos, calculamos que este cuadro pudo ser pintado por un alumno de dicha Escuela entre esas fechas, por un maestro del famoso Jean-Baptiste Siméon Chardin.. No ha sido posible determinar referencialmente más detalles y sólo cabe hacer una investigación química y comparativa muy exhaustiva para mayores precisiones, pero al parecer no existe peritaje posible en ese sentido.
Alguien me ha dado hace unos años las referencias adecuadas para descubrir que el cuadro, que en principio creía copia del de Jean Simeón Chardin (1699-1779), parece ser que éste lo copió del bodegón en mi poder, según lo que he podido investigar.
La obra se llama: "Nature morte avec Flacon en verre et de fruits"
A pesar de mis investigaciones se mantiene el dilema: ¿Quién copió a quién?. ¿Alguien copió a Jean Simeón Chardin, o fue una de las primeras copias a un maestro de la Académie Royale de Peinture et de Sculpture? Pero...
Cabe decir que un genio de la pintura puede hacer una obra mejor que sus maestros, así que no cuentan aquí las calidades logradas... Salvo en detalles que veremos luego.
He hablado con mucha gente sobre este bodegón y parece ser anterior al de Chardin.
Lo averiguado y bien sabido es:
1) Que el cuadro se intentó recuperar para El Escorial junto a otras muchas obras, pasada la Guerra Civil, ofreciendo por él nueve mil pesetas pero el dueño no quiso venderlo. Si sólo fuese eso, habría concluido allí mi búsqueda, porque no han pasado ni ocho décadas, pero:
2) Lleva una firma de la Orden Templaria Cátara de Aragón (de lo cual puedo dar fe porque tiene detalles que no tienen nada que ver con los parecidos sellos católicos de la Orden de San Andrés ni los extinguidos Templarios de Pontevedra y otras) Puso ser hecho por algún miembro del Círculo Cátaro de El Escorial, como explico más arriba, pero esta cofradía dependía de la Orden Templaria de Aragón. La firma se inserta en la pintura por igual, de modo que no es extemporánea al cuadro. Habría que encargar un análisis químico para determinarlo pero no hemos hallado expertos con tecnología para hacerlo.
3) Un añejamiento natural o químico no se puede determinar a simple vista, pero tengo un poco de recelo, porque habrá que sacar muestras sin dañar la obra y no he encontrado en España nadie imparcial quien me garantice la validez de los resultados. Es interesante que las personas contactadas tienen demasiado interés en el cuadro, pero sus ofertas son bajas.
4) Tengo amigos que conocen ese bodegón como a la familia de la ex-propietaria desde antes que yo naciera. Habría que ver si había hace ocho décadas medios químicos para añejar con esas calidades y para hacerlo habría que tener un "móvil", que considero inexistente en El Escorial. Sobre todo cuando el padre Licinio ha intentado recuperar el cuadro, pero la propietaria no quiso venderlo, respetando la voluntad de su difunto marido.
5) Viendo miles de cuadros en museos, conventos, iglesias... las fechas me empezaron a cuadrar con el s XV y XVI. Sin embargo hemos de tener en cuenta que:
6) Chardin jamás salió de Francia. Al parecer fue sólo una vez a Versailles, donde fue presentado a Luis XV, y otra vez a Bordeaux, en 1777 donde permaneció varios días. No sabemos a qué fue.
No estuvo en El Escorial ni en ningún lugar de España, y no lo han estado sus obras salvo que el Museo del Prado las haya traído en exposiciones temporales. No podemos hablar de fotografía en color hasta fines del s.XIX y las fotos u otras copias del cuadro en color intermedias que hubiera, no habrían dado ni por lejos las calidades obtenidas en esta copia (o en la copia de Chardin...).
7) Por otra parte, el cuadro en mi poder tiene una obscuridad que ningún copista habría utilizado. El cuadro de Chardin coincide con su estilo personal general, pero si él lo copió lo hizo "más fácil". Dos amigos, grandes pintores, uno de los cuales vive de las copias y restauraciones, coinciden en que Chardin no habría copiado la obscuridad del cuadro, siendo su estilo personal la luminosidad, mucho más fácil de lograr que el tono lúgubre de la obra (original anterior, según ellos).
8) Para hacer una copia con ese nivel, además de la dificultad de basarlo en un fondo oscuro diferente al de Chardin, el copista tendría que haber estado frente al cuadro. En los museos eso no es posible y esa obra de Chardin estuvo expuesta desde mucho antes de la muerte del pintor en la Académie Royale. Ahora está expuesta -curiosamente- en el Staatliche Kunsthalle Karlsruhe, la que llamamos "Ciudad Templaria" de Alemania... La imagen fue adquirida en 1761 por la condesa Karoline Luise y según el museo nunca se autorizó su exposición para copias, como es lógico.
¿Estuvo un copista frente a la obra siempre expuesta? Imposible, no se permite, a menos que estuviera algún tiempo -desde 1750 (fecha aproximada, no conocida en realidad) hasta 1761- en la Académie Royale de Peinture et de Sculpture, de la que Chardin fue alumno, maestro y hasta tesorero y director interino. Es el único lapso en que podría haberse copiado, aunque los pintores en la posición de Chardin difícilmente permitan que se copien sus obras. En cualquier caso el copista sería coetáneo del autor.
9) Un pintor Templario JAMAS se puede dedicar a hacer copias. Es una especie de herejía, aunque no juzgamos a quienes lo hacen. Y aunque esa es una razón para mí fundamental y cabría ponerla en el primer lugar y no en noveno, es algo que no hace lugar en una investigación científica cartesiana. Por eso sospecho, más que por cualquier otro detalle, que Chardin copió de ese cuadro como ensayo, aunque agregando su estilo y talentos personales. Parece que Chardin no era Templario, pero tenía amigos arquitectos y otros pintores que lo eran. No sabemos qué alcance tenía su relación, aparte de la amistad.
Me queda por averiguar:
a) Si hay otras obras con sellos similares en otras iglesias y museos, incluyendo El Escorial.
b) Antigüedad del bodegón según análisis químicos.
c) Investigar en las muy cerradas Órdenes Templarias de Bordeaux, Toulouse y Versailles, que cuentan con archivos históricos, si el motivo del viaje a Bordeaux de Chardin, que no consta en las biografías más difundidas, por qué tuvo que ver con asuntos templarios o qué contacto tuvo con alguno de sus maestros. Eso podría echar más luz en la historia del cuadro y de Chardin.
Hay más detalles, que van saliendo a medida que se investiga, que al final requerirían un libro, pero por un cuadro, como que no tiene sentido, aunque pueda valer una fortuna. Por ahora prefiero venderlo en vez de seguir gastando tiempo y dinero en investigación.
Aunque no sepamos quién es el autor, nos queda claro que la época es anterior a Chardín, y por ello el precio mínimo que aceptaría sería del promedio de cuadros anónimos de esa calidad y estilo de aquella época, es decir de unos 88.000 euros.
Bellísimo jarrón perteneciente a la familia de Felipe II, valorado en Consultar precios.
Este óleo antiguo no tiene firma, pero se estima por datos familiares que es anterior a 1890.
Consultar precio de ésta y otras obras de arte antiguas.
Datos de contacto: Gabriel, Tlf: 639 284 787
Alicante, España. gabrielsilvaescritor@gmail.com